¿Qué es un pienso hipoalergénico?

Las dietas hipoalergénicas son una herramienta diagnóstica y terapéutica para pacientes con sospecha o confirmación de padecer una intolerancia o alergia alimentaria.
Pueden cubrir las necesidades de un animal en mantenimiento, pero su uso está pensado para ser transitorio y temporal. Ante la amplitud del mercado, cribar qué pienso nos vale y cual no es elemental, por ello vamos a enseñaros qué características debe tener un pienso hipoalergénico.

¿Qué es y cómo funciona un pienso hipoalergénico?

Un pienso hipoalergénico es un pienso cuyos ingredientes están hidrolizados. Esto quiere decir que el tamaño de las proteínas que provocan la respuesta alérgica o antígenos está reducido mediante un proceso llamado hidrólisis, el cual consiste en una digestión parcial.

El tamaño a partir del cual el sistema inmune no reconoce los antígenos es de 10 Kilodalton. Este tamaño es sumamente pequeño y es difícil de obtener, por varios motivos:

  1. Este tamaño de molécula es tan pequeño que casi terminan siendo aminoácidos sueltos. Estos tienen un sabor terriblemente amargo y el pienso resultaría incomible, por ello no se apura tanto y se reduce a un tamaño en el que siguen siendo palatables pero con un riesgo mínimo.
  2. La hidrólisis es un proceso caro cuyo coste aumenta según se reduce el tamaño de la proteína.

Por ello, los piensos hipoalergénicos tienen un tamaño de antígeno un poco mayor que este. Para hacernos a la idea, la criba entre analergénico e hipoalergénico está en los 18 Kilodalton, mayores a este tamaño son hipoalergénicos y menores, analergénicos.

Al ser ingerido, la respuesta inmune típica de las reacciones de hipersensibilidad alimentaria, en muchos casos no llega a darse.

¿Qué no es un pienso hipoalergénico?

Un pienso hipoalergénico no es un pienso que lleve proteína nobel como conejo, avestruz o salmón. Para ser hipoalergénico es imprescindible que sea proteína hidrolizada. La proteína nobel, aunque resulte eficaz no es ni diagnóstica ni terapéutica y además es susceptible de generar alergias en las proteínas que lleva, característica que no sucede en los hidrolizados.

Cada vez hay más proteínas de distintos orígenes en el mercado lo que reduce la eficacia de la estrategia de proteína nobel. Entre esto y las reacciones cruzadas (alérgicos al pollo pueden tener reacción al pavo) es más difícil que sea efectiva.

Es muy frecuente ver marcas que se definan como antialérgica o hipoalergénica sin tener la proteína hidrolizada. Esto no solo es publicidad engañosa, sino que afectará a la salud de nuestro animal.

¿Qué requisitos tiene un pienso hipoalergénico?

Los requisitos que debe tener un pienso hipoalergénico son:

  1. Proteína hidrolizada: Este ya se ha comentado repetidas veces ya que es un punto clave para las características finales del producto y la respuesta inmune que vaya a suscitar. El tamaño de antígeno ideal será el más pequeño posible siempre que el producto resulte palatable para el animal. Repetimos, cualquier producto que no se ajuste a esto NO ES HIPOALERGÉNICO.
  2. Conocimiento del tamaño del hidrolizado: No suele ser un dato que venga indicado en el etiquetado ya que muchos propietarios no saben interpretarlo (hecho totalmente normal ya que es un conocimiento técnico muy específico). El fabricante debe ser capaz de respondernos a esta pregunta en caso de querer contactar con él.
  3. Línea de producción exclusiva o garantía de ausencia de trazas: La máquina que produzca el pienso (o extrusionadora) debe ser exclusiva para este producto. Cada vez los piensos tienen más variedad de sabores dentro de una marca y es habitual que utilicen la misma extrusionadora para varios quedando restos de proteínas de uno en otro. Para asegurar de que esto no ocurre en un hipoalergénico, debe o bien asegurar la ausencia de trazas mediante inmunodiagnóstico o PCR negativa de estas en el pienso o bien teniendo una línea exclusiva.
  4. Completo y equilibrado: Va a ser la única alimentación que reciba nuestro animal durante un periodo mínimo de 8 semanas. El alimento debe estar etiquetado como completo y equilibrado para asegurarnos de que no va a haber deficiencias nutricionales durante este tiempo.
  5. Resultados probados: No nos olvidemos de que se trata de una herramienta diagnóstica, es decir, que tanto la salud como el diagnóstico de nuestro animal depende plenamente de ello. Por lo tanto, se debe tener un respaldo científico realizado o bien mediante estudios retrospectivos de casos clínicos, por ensayos de alimentación, o ambas.

¿Cómo utilizar un pienso hipoalergénico?

Este alimento forma parte de las dietas de exclusión. Las principales pautas para estas son:

  1. Alimentación exclusiva con el pienso hipoalergénico o analergénico: Para poder valorar si el cese o continuidad de los síntomas se debe a la alimentación. Aquí también entran las conductas de caza o pica (comer hierba o basuras). Si damos proteínas no hidrolizadas o el animal tiene acceso a ellas, no podrá valorarse la eficacia del tratamiento.
  2. Racionamiento con cantidades adecuadas al peso del animal: Debemos evitar dar el pienso Ad-Libitum, ya que por el sabor amargo que hemos comentado, estos piensos suelen incluir una generosa cantidad de grasa para mejorar su sabor. Esto unido a que la proteína hidrolizada es tremendamente digestible, debemos controlar bien el racionamiento para evitar que nuestro animal engorde.
  3. Constancia: El principal factor limitante de la continuidad son los dueños. Este es un protocolo de 8 semanas de duración, muy largo. Por lo tanto debemos tomarnos esto como una maratón y ser constantes con la alimentación y no caer en la tentación de darle premios.