Al igual que nos pasa a nosotros, un cambio en la vida, la soledad, el aburrimiento o cualquier otro factor que consideremos más triste de lo normal, puede influir en nuestro estado de ánimo, pero también en el de nuestros perros. Lo malo es que no suele ser percibida tan fácilmente en las mascotas.
Por ello, aquí te dejamos las posibles causas que pueden llevar a tu perrito a estar deprimido. De entre las más importantes, las dos que te mencionamos a continuación suelen ser las más comunes pero también las más fáciles de detectar para poder prevenir la depresión y hacer algo por ellos.
Causas que pueden llevar a tu perro a estar deprimido
Como bien hemos comentado, la soledad y el aburrimiento suelen ser algunas de las causas y motivos por las que nuestro perro puede estar deprimido, pero también encontramos otras más comunes de lo que parece y quizá, las más importantes.
Si se trata de aburrimiento o soledad, se puede poner remedio fácilmente pero en cambio, si es por la pérdida de un ser querido o una mudanza repentina, la detección es más difícil y el hacer algo por ellos cuesta más trabajo. ¿Cómo saber si nuestro perro está deprimido por esos factores?
Pérdida de un ser querido
Perder a alguien de la familia no solamente es doloroso para las personas que lo querían, sino que para sus mascotas incluso, podría llegar a suponer una gran depresión. Sobre todo si estaban muy acostumbradas a estar con esa persona.
La falta de repente del trato, el cariño y la seguridad que le aportaba en el hogar el dueño o esa persona tan querida al perro, y más sin entender nada, les coge de sorpresa. No entienden qué está pasando pero comprende que el ambiente está triste y apagado y además, le falta esa persona que siempre tenía y ya no la ve por ninguna parte.
Por ello, intentar sobrellevar esta situación realizando las mismas tareas y costumbres que tenía el perro con esa persona resulta muy efectivo para evitar este trastorno en esos momentos tan duros para todos.
Traslado del hogar o una mudanza rápida
Cuando el perro llega a una nueva familia, un nuevo hogar o simplemente, hay una mudanza y sus cuatro paredes no son las mismas, se siente perdido. Los perros no pasan por el mismo proceso de adaptación que nosotros.
De hecho, cuando hay algún cambio suelen buscarnos y requerir nuestra presencia y ayuda para sentirse seguros y saber que todo va bien a pesar de los cambios. Y más si se trata de una mudanza rápida o repentina en la que toda la familia se traslada de hogar y el perro se encuentra de repente en un nuevo sitio.
Estos cambios de rutina y nueva adaptación pueden llegar a causarle una depresión. Por eso es importante mantener su rutina de paseos, mimos y caricias y, dentro de lo que se pueda, no dejarle solo en el nuevo hogar hasta que se acostumbre del todo a sentirlo como su casa.
Síntomas para su prevención
A la hora de percibir los síntomas de nuestro perro para saber si está deprimido, hay que fijarse en su estado anímico, su forma de comer, su rutina diaria y la manera en la que te recibe cuando llegas a casa.
Por lo general, los síntomas principales para la prevención de la depresión de un perro es que deje de comer o ya no coma la misma cantidad que antes, que no quiera jugar con el dueño, que salga a la calle apenas sin ganas y que no reciba con la misma efusividad a todos cuando entran en casa.
Si se trata de puntos aislados, no hay de qué preocuparse, los perros también tienen días malos como nosotros y no por ello tienen que estar deprimidos. Si por el contrario perdura más tiempo, lo correcto será llevarlo al veterinario, quien dictará qué medicamentos y tratamiento necesita para su cuidado y protección contra esta enfermedad.
