La sandía y el melón son frutas muy ricas en agua que las personas suelen consumir en los meses de más calor. Pero, ¿pueden los perros comer sandía o melón también? A continuación hablamos de los beneficios de ambas frutas y de cómo dárselas a nuestro perro.
Beneficios del melón y la sandía para los perros
Los perros de cualquier edad pueden comer tanto sandía como melón en sus diferentes variedades. Son frutas muy ricas en agua, por lo que contribuyen a conseguir una buena hidratación, lo que es especialmente interesante durante los meses más cálidos del año. Su contenido en agua también proporciona un efecto diurético y previene infecciones en el tracto urinario.
Contienen, además, antioxidantes que ayudan a luchar contra los radicales libres, a combatir el envejecimiento y a fortalecer el sistema inmune, lo que es especialmente interesante para los cachorros y los ejemplares de mayor edad o debilitados por algún motivo. La sandía es rica en vitaminas como la C y minerales como el potasio o el fósforo. Además, es digestiva y contribuye a la vasodilatación y la recuperación muscular.
Por todo ello, sumado a la fibra que contiene, resulta beneficiosa para ayudar a la regulación del tránsito intestinal en perros con problemas de estreñimiento. Además, al ser baja en calorías, es apta para ofrecérsela como premio a perros con sobrepeso o tendencia a engordar. Por su parte, el melón es rico en vitaminas C y K y minerales como el potasio y el fósforo. Por todos estos beneficios se recomienda su consumo en perros, siempre que este sea moderado.
¿Cuánta sandía o melón puede comer un perro? Dosis
Aunque en la práctica omnívoros, los perros son carnívoros que, como tales, deben consumir una dieta basada en la proteína de origen animal. Esta puede proceder tanto de la carne como del pescado. Además, parte de su ración diaria puede corresponder a otros alimentos. Si les damos una dieta casera, será el profesional especializado en nutrición canina quien nos marque las cantidades de todos los ingredientes y su frecuencia de consumo.
Pero si administramos una dieta comercial, los perros pueden comer sandía o melón a modo de premio. En este caso la cantidad no puede exceder el 10 % de la ración diaria. Podemos darle a nuestro perro una rodaja de sandía o de melón entera o la mitad, dependiendo de su tamaño y de las dimensiones del perro. Si quieres darle a la vez ambas frutas, reduce la cantidad de cada una para que el total no resulte excesivo.
De todas formas, lo mejor es dar un pequeño trozo en primer lugar y observar cómo le sienta al perro antes de darle otra vez o más cantidad. No todos los perros toleran las frutas de la misma manera. En cualquier caso, su consumo debe ser ocasional. Un exceso de sandía o de melón podría tener como consecuencia algún desarreglo digestivo, como la aparición de heces blandas o flatulencias.
Cómo darle sandía o melón al perro
Un perro puede comer pulpa de sandía y de melón directamente. Tan solo se recomienda retirar la parte verde y las semillas, ya que a algunos perros no les sientan bien. Son más difíciles de digerir y pueden provocarles malestar a nivel digestivo e incluso podrían atragantarse con un trozo entero, especialmente si se trata de un perro de tamaño pequeño.
En estos casos es importante consultar con el veterinario. Una ingesta ocasional o de pequeñas porciones con piel no tiene por qué provocar ningún problema, pero mejor ofrecer solo la pulpa para evitar riesgos. Tanto la sandía como el melón pueden darse como premio, por ejemplo, para recompensar las conductas positivas del perro durante las sesiones de aprendizaje.
A los perros suele gustarles su sabor. Aunque dar ambas frutas en trozos directamente es lo más común, lo cierto es que los perros pueden comer sandía o melón, por ejemplo, en forma de helado. Es una alternativa refrescante y entretenida para los días de más calor.
Helados caseros para perros de sandía y de melón
Con ambas frutas podemos hacer helados aptos para nuestro perro. Tanto la sandía como el melón pueden mezclarse con yogur natural sin azúcar para elaborar el helado, siempre que a nuestro perro no le sienten mal los derivados lácteos. En ese caso, el yogur podría sustituirse por bebida de arroz o, simplemente, por agua.
Tan solo hay que trocear la pulpa de la sandía o del melón, mezclarlo con el yogur y pasarlo por la batidora hasta que quede homogéneo. Después solo hay que introducirlo en un recipiente para hacer helados o cualquiera apto para el congelador. En ese caso no olvides poner en el centro un palito, que puede ser el típico snack para perros, que te permita retirar el helado con facilidad.
Para que quede centrado, cubre el recipiente con papel vegetal y haz el agujero para meter el palito justo en el centro. En unas horas, tu perro podrá comer sandía o melón en helado. Puedes dárselo como premio ocasional un par de veces a la semana.