Cuando hablamos del perro de raza Shih Tzu, encontramos un can juguetón, de carácter afable y que es perfecto para vivir en familia. Un gran amigo para todos que conseguirá atraer las miradas por todos los lugares por los que pase.
¿Cuál es el origen de la raza?
El orígen de la raza Shih Tzu proviene del tíbet, del mismo tronco común de todas las razas de perro tibetanas, como es el caso del Lhasa Apso o el Terrier Tibetano. Se cuenta que un Dalai Lama llamado Lobsang Gyatso fue el responsable de introducir la raza en la corte china. Dicho Dalai, viajaba con sus perros y éstos eran ofrecidos como regalo a la emperatriz y su corte.
Fue el propio emperador el que mandaba las directrices de cómo debía ser esta raza y para ello, se seguían los treinta y dos signos de Buda: mandíbulas como el león, pelaje de color dorado, una lengua ancha y larga, etc. Esto fue así hasta que la raza llega a Occidente y, es entonces cuando la raza comienza a cambiar con diferentes cruces para adaptarla a los gustos de la época.
Quienes pusieron todo su empeño en criar perros Shih Tzu tal y como lo conocemos en la actualidad fueron los estadounidenses, los cuáles llevan desde el año 1930 buscando un perro de gran belleza y con un carácter adorable.
¿Cómo es un Shih Tzu?
Encontramos al Shih Tzu dentro del grupo 9 de la FCI (perros de compañía) y en la sección 5 (perros tibetanos). Un perro de raza pequeña pero vigorosa, con abundante cantidad de pelo pero sin ser excesivo y con porte altivo.
Si hablamos de medidas, en esta raza no se permite que el ejemplar supere los 27 cm. El peso debe comprenderse entre 4,5 a 8 kilos, aunque lo ideal es que éste se encuentre entre los 4,5 y 7,5 kilos de peso.
Su cabeza debe ser en forma redonda y ancha, debiendo existir amplitud entre ambos ojos. El pelo que se sitúa en esta zona, debe ser abundante y tener barba y bigotes y ésto no debe afectar a la visión del perro. Debe tener un stop bien definido.
La trufa debe ser color negro y sólo se acepta el color hígado en aquellos ejemplares que dispongan dicho color. Su hocico debe ser amplio, cuadrado, corto, plano sin arrugas y debe contener una cantidad de pelo adecuada. Su mordida debe ser en pinza y tiene que tener, además, un ligero prognatismo inferior.
Aunque hay personas que pueden ver los ojos saltones, en el Shih Tzu no deben ser así. La forma de sus ojos deben ser grandes y redondos, de color oscuro y con una expresión afectuosa. Si el ejemplar es de color hígado, se acepta que los ojos sean más claros.
Sus orejas son grandes y deben ser colgantes. Deben estar recubiertas por pelo denso, de manera que parezca que se funden con el pelo que se encuentra en la zona del cuello. En cuanto al resto del cuerpo, debe tener una espalda recta, un lomo bien acoplado y robusto y un pecho amplio y profundo. Su cola debe estar siempre recubierta de pelo en forma de pluma y situarse alegremente sobre su espalda.
El pelo del Shih Tzu debe ser largo, lo suficiente para que no incomode el movimiento del perro. El pelo exterior debe ser largo y el subpelo moderado. Se permite una leve ondulación pero no se permite que sea rizado. En cuanto a los colores, se admiten todos y es deseable encontrar un mechón blanco en la zona de la frente y la punta de la cola.
Así es el carácter del Shih Tzu
“Una de las razones por las que me enamoré de esta raza, a parte de su belleza inigualable, fue por el carácter. Son perros tan mágicos, tan simpáticos y juguetones que hicieron que dejase todo por dedicarme en exclusiva a ellos.” Quien nos cuenta esto es Esperanza, una criadora que lleva en la raza más de 30 años. “Es un perro que siempre está atento de su propietario y que prefiere estar con las personas y en compañía. La verdad que yo, desde que tengo un Shih Tzu en mi vida, jamás me he sentido sola.”
“Si quieres adquirir un perro de esta raza, debes tener muy en cuenta que acostumbran a ser bastante dependientes, por lo que no es aconsejable para personas que pasan mucho tiempo fuera de casa. Aunque si lo pensamos bien, ninguna raza es buena para algo así, los perros siempre necesitan estar cerca de quien cuida de ellos.”
También nos cuenta Esperanza que esta raza es genial para personas mayores o para niños, ya que, en el caso de mayores, saben comportarse muy bien y, en el caso de los niños, aseguran mucho tiempo de juegos. “Eso sí, nunca olvidemos que son perros y, por muy cariñosos que sean, siempre hay que vigilar.”
¿Qué enfermedades puede tener un Shih Tzu?
Aunque es una raza de perro bastante robusta, sí que podemos encontrar ciertas enfermedades en esta raza. Encontramos:
- Síndrome de queratopatía.
- Cataratas.
- Labio leporino o paladar hendido.
- Seno dermoide.
- Ectropion.
- Anomalías en pestañas.
- Enfermedad renal.
- Hidrocefalia.
- Enfermedad del disco intervertebral.
- Queratoconjuntivitis seca.
- Displasia de retina.
Cuidados importantes en el Shih Tzu
“Si queremos tener un perro de revista, deberás tener en cuenta que requiere de muchísimos cuidados y tiempo. Es necesario poner aceites especiales y embolsar el pelo del animal, cepillar y lavar varias veces en semana. Esto es algo complicado que hacen solo los profesionales. Si eres particular, lo mejor será que tu perro lleve el pelo corto para evitar enredos y problemas en el pelo y por consiguiente, en la piel.” Esto nos comentan desde la peluquería de perros “Elecante”, situada en Barcelona.
En cuanto a actividad física, aunque son perros de tamaño pequeño, también necesitan descargar energía. Es importante que en sus paseos se juegue con ellos o se les brinde la oportunidad de poder correr.
¿Dónde adoptar un Shih Tzu?
Si estás interesado en adoptar un Shih Tzu, podrás encontrar en diferentes protectoras de España. Por desgracia, es una raza que también sufre el abandono y, en ocasiones, surgen ejemplares que están buscando un nuevo hogar.
