Poco conocido fuera de Suecia, su país de origen, el Drever, muy similar a los perros salchicha, es allí un perro de caza muy popular, resistente e incansable en el trabajo. También se ha ganado un hueco en los hogares como perro de compañía.
Datos básicos
- Peso: 14,5-15,5 kg.
- Altura: 29-41 cm.
- Esperanza de vida: 12-14 años.
- Ideales para: personas con experiencia en perros de trabajo.
Historia de la raza sueca Drever
El Drever es un perro procedente de Suecia y es raro encontrarlo fuera de su país. En cambio, en él es de los perros más populares, con un éxito comparable al de razas tan conocidas a nivel mundial como el Labrador retriever.
Su origen se sitúa en el siglo XX y, por lo tanto, en muy poco tiempo se ha convertido en una raza imprescindible, sobre todo para los cazadores noruegos, ya que es un reconocido perro de caza. Se empleó desde sus orígenes, sobre todo, para cazar ciervos, liebres, zorros e incluso jabalís.
Hoy en día, además de participar en la caza, se encuentra como perro de compañía. Sus antepasados fueron los Dachsbracke o Sabueso de Westfalia, muy escasos en la actualidad, y sabuesos locales.
Características del Drever sueco
A pesar de que su peso puede hacer pensar en que se trata de un perro de tamaño mediano, lo cierto es que el Drever es pequeño y asalchichado, es decir, posee patas cortas y cuerpo más largo que alto. La cabeza es alargada, grande y bien proporcionada. Los ojos son claros y de expresión alerta y viva.
Las orejas van pegadas a la cabeza y tienen las puntas redondeadas. El labio superior se ajusta sobre la mandíbula inferior. Destaca su hocico, pues posee un excelente olfato como buen perro rastreador que es. Como decimos, las patas son cortas, lo que hace que no consiga la misma velocidad que otros perros, aunque no afecta a su habilidad para la caza.
Se encarga de dirigir a la presa hacia el cazador. Las patas delanteras se disponen verticales y paralelas. La cola es de inserción alta y describe una curva hacia abajo. Es moderadamente larga. El pelaje es corto, grueso, áspero y bien apretado al cuerpo. El manto lo encontramos en las combinaciones de colores blanco y negro, tricolor o leonado y blanco.
Carácter del Drever
Son perros que destacan por su capacidad para el trabajo y su resistencia. Los cazadores lo comprueban cuando, en el monte, quiere seguir trabajando aunque la jornada ya ha concluido. Es un excelente perro rastreador. Además, presenta unas destacadas cualidades para convertirse en el perfecto alumno. Tiene una buena disposición para el aprendizaje.
Como contrapartida, suele mostrar un exceso de celo. Es testarudo, valiente, independiente y tenaz, a la vez que inteligente y enérgico. Por eso debemos dedicarle tiempo a educarlo y hacerlo con paciencia y firmeza, nunca con violencia. Es un buen perro guardián, siempre alerta y con un ladrido potente y ruidoso. Con los extraños es normal que sea precavido.
Va a disfrutar más realizando alguna tarea que pasando horas encerrado en casa, aunque es lo suficientemente amable, cariñoso y sociable como para adaptarse a la vida como perro de compañía, sobre todo si se ha criado desde cachorro. Proporcionándole las atenciones que requiere, será un estupendo perro que disfrutará acompañando a su cuidador a todas partes.
Cómo cuidar a un Drever
Su historial cazador no le ha impedido adaptarse a la vida en un apartamento, siempre que goce de la estimulación que necesita a nivel físico y mental. Pero hay es muy probable que se encuentre más a gusto en una casa con terreno y espacio. Puede vivir como perro único, pero habitualmente prefiere disfrutar de la compañía de sus congéneres.
Con otras especies, como los gatos, puede haber problemas dado su instinto cazador. Su procedencia lo ha acostumbrado a bajas temperaturas, por lo que puede vivir en climas fríos, nieve incluida. Podemos jugar con él utilizando el olfato y aprovechando sus cualidades para el rastreo. Basta con esconder algún objeto y animarlo a encontrarlo utilizando su olfato.
Si lo soltamos o dispone de algún terreno hay que comprobar que es seguro, ya que puede fugarse tras un rastro interesante. Se concentra tanto que es fácil que se despiste. El juego, la actividad física y, en general, la estimulación a todos los niveles son pilares básicos e ineludibles para su bienestar. En cuanto a la higiene, basta con cepillarlo de vez en cuando.
Enfermedades del Drever
En general, se trata de perros robustos que gozan de buena salud. Como mucho, pueden lastimarse en alguna de sus correrías por la naturaleza. Es buena idea que lo revisemos tras esas intensas jornadas por si se ha hecho alguna herida y lo observemos en caso de que presente alguna cojera o lesión similar.
Otro punto de atención son las orejas. Pueden introducirse cuerpos extraños y generar infecciones. Por otra parte, un Drever inactivo, sin estimulación física ni mental, se va a estresar, lo que se manifestará como problemas de comportamiento tipo ansiedad, destructividad, etc.
Por ello, si no podemos atenderlo como necesita, no deberíamos adoptar un ejemplar de esta raza. Y, en cualquier caso, es importante saber que estos problemas son solucionables cambiando las condiciones de vida del animal y recurriendo a profesionales de la conducta canina o etólogos.